Esta red ayudaba a los cibercriminales a lavar dinero. 20 arrestos en 16 países vinculados al cartel QQAAZZ

Gracias a una operación internacional en la que participaron las agencias de investigación de 16 países, además de Europol, se concretó el arresto de 20 individuos sospechosos por sus vínculos con la red criminal QQAAZZ, responsable de lavar decenas de millones de euros para los grupos delictivos más importantes del mundo.

Esta operación consistió en el allanamiento de casi 40 ubicaciones en Bulgaria, España, Italia, Letonia y Reino Unido, lo que permitió iniciar procesos legales contra los arrestados en Estados Unidos, Portugal, Reino Unido y España. Muchos de los arrestados estaban en posesión de equipos para el minado de criptomoneda

FUENTE: Europol

Acorde a las acusaciones presentadas por los fiscales estadounidenses, la red QQAAZZ ha estado activa desde 2016, convirtiéndose en uno de los principales aliados de múltiples grupos criminales.

Informes de Europol mencionan que la red QQAAZZ está integrada por individuos originarios de Georgia, Rumania, Bélgica, entre otros países, desde donde operaban cientos de cuentas bancarias (individuales y corporativas) en instituciones financieras de todo el mundo con el fin de recibir el dinero de los grupos criminales. Posteriormente estos activos eran transferidos a otras cuentas bancarias controladas por la red criminal o bien convertidos en criptomonedas. Finalmente, después de varios procesos de blanqueamiento, los activos eran transferidos nuevamente a los grupos criminales.   

FUENTE: Europol

Los criminales aseguraron estas cuentas bancarias empleando documentación fraudulenta procedente de Polonia y Bulgaria, creando docenas de empresas ficticias que sólo eran empleadas para ocultar sus actividades criminales.

Acorde a los operadores de la red criminal, QQAAZZ era un servicio global para transferencias bancarias, anunciándose principalmente en foros de hacking rusos, donde encontraban a la mayoría de sus clientes. Europol menciona que esta red prestaba sus servicios a algunos de los grupos operadores de ransomware más importantes del mundo, lo que garantizaba el flujo constante de ingresos.

El Centro Europeo de Ciberdelincuencia (EC3) de Europol organizó reuniones operativas, proporcionó apoyo forense digital y facilitó el intercambio de información entre las diferentes agencias policiales que participaron en esta operación internacional, además de colaborar con el envío de agentes especializados cuya labor fue fundamental para el arresto de estos individuos.