En 2021, 65% de los adultos mexicanos han enfrentado intentos de estafa bancaria. Una nueva modalidad de fraude podría aumentar las cifras exponencialmente

Los intentos de fraude telefónico son uno de los riesgos de seguridad más comunes en la actualidad, ya que cualquier usuario puede verse expuesto sin importar su edad, país de residencia o nivel de estudios. Además de las llamadas telefónicas, los grupos operadores de estas estafas recurren a la creación de sitios web maliciosos que facilitan el robo de información confidencial.

Los reportes de Microsoft señalan que estos problemas son especialmente graves en los países latinoamericanos. En México, por ejemplo, durante 2021 el 65% de las personas mayores de 18 años han sido objeto de al menos un intento de estafa telefónica, principalmente la variante conocida como fraude de soporte técnico. 

Si bien el número de usuarios que caen en la trampa se redujo respecto al mismo periodo de 2020, el nivel de pérdidas económicas derivadas de esta práctica criminal aumentó en 14%. Sobre los usuarios que reciben esta clase de llamadas, el 91% reportó haber sospechado del falso operador telefónico, mientras que el 68% dijo haberse sentido incómodo o estresado por la actitud del interlocutor.

Por otra parte, los usuarios muestran cada vez más desconfianza al recibir estas llamadas no solicitadas. El reporte de Microsoft menciona que el 82% de los usuarios muestran muy poca confianza en estas llamadas; de este grupo de usuarios, el 73% cree altamente probable que la llamada sea parte de un intento de estafa electrónica.

Este escenario parecería ser optimista rumbo a la erradicación de esta práctica cibercriminal. No obstante, los actores de amenazas han sabido desarrollar nuevos mecanismos para seguir engañando incluso a los usuarios más avispados, aprovechando circunstancias como la implementación del trabajo remoto y la digitalización de múltiples servicios.

Según el reporte de Microsoft: “Los usuarios ya no enfrentan solo llamadas telefónicas fraudulentas, sino que son objetivo de una infraestructura de hacking sofisticada que involucra la falsa venta de servicios en línea, administración de sistemas remotos y otras variantes de fraude.”

El principal riesgo de estas nuevas variantes de ataque es el robo de información empresarial, principalmente credenciales de acceso a plataformas de banca en línea. Un ataque exitoso permitiría escenarios de riesgo desde el robo de información privada hasta casos de fraude bancario. Aún falta la mitad de este año, aunque los expertos creen que estas tendencias se mantendrán e incluso existen altas posibilidades de incrementar.

Para conocer más sobre riesgos de seguridad informática, malware, vulnerabilidades y tecnologías de la información, no dude en ingresar al sitio web del Instituto Internacional de Seguridad Cibernética (IICS).