Gane dinero del gobierno hackeando satélites del ejército

Estados Unidos pretende proteger cada potencial vector de ciberataque. Expertos en hacking ético informan que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) se encuentra trabajando con inteligencia artificial para encontrar cualquier evidencia de comportamiento anómalo en los satélites de E.U. para saber si están bajo control de alguna nación adversaria.

En un reciente evento de ciberseguridad, Aaron Ferguson, jefe de la Oficina de Soluciones de Cifrado de la NSA, declaró que “la agencia está buscando la mejor manera de caracterizar los datos de telemetría en los satélites para realizar algunos ajustes al tiempo que nuevos satélites son puestos en línea”. El plan incluso contemplaría la colaboración de investigadores independientes.

El plan de la NSA deriva de la conducta observada en muchos satélites. La mayoría de los satélites pequeños operan en la órbita baja de la tierra; en caso de que un satélite opere o se desplace a regiones superiores, se envían datos diferentes, prueba de conducta anómala. Estos datos pueden fungir como indicadores de alguna clase de intrusión, no obstante, es necesario analizar demasiada información antes de determinar un intento de ciberataque; es por esta razón que la NSA tratará de usar inteligencia artificial para tratar de encontrar indicadores de intrusión maliciosa, mencionan los expertos en hacking ético.

Aunque parece un tema de ciencia ficción, hackear un satélite es una posibilidad real; acorde a un reporte publicado hace tiempo por expertos en hacking ético del Instituto Internacional de Seguridad Cibernética (IICS) aunque estos equipos ejecutan software altamente especializado y sofisticado, ejecutan sistemas operativos de dominio público, como Linux o Unix, lo que los vuelve vulnerables a cualquier variante de ciberataque contra cualquier sistema conocido. 

Por otra parte, Bill Malik, de la firma de seguridad Trend Micro, sostiene: “Aunque no es tan simple como tomar control de una cuenta de email, un hacker con los recursos necesarios puede tomar control de un satélite de forma inadvertida. La clave está en comprometer los sistemas de control en tierra del satélite”, afirma el experto. Malik además mencionó que existen al menos seis antecedentes de hacking exitoso contra satélites de la NASA, todos ocurridos entre 2006 y 2011.

Los especialistas en hacking ético afirman que esta es una amenaza que ha crecido recientemente, pues los recursos técnicos para desplegar estos ataques cada vez son menos costosos, además, los beneficios para los hackers pueden ser realmente altos. Diferentes industrias y servicios, como sistemas para la agricultura, podrían verse afectados por los ataques contra satélites.

En cuanto a los sistemas de defensa, los hackers podrían tomar control de satélites de monitoreo para inhabilitarlos o alterar la transmisión de información, en un escenario similar al ocurrido hace más de 20 años, cuando un grupo de actores de amenaza se apoderó del satélite ROSAT, usado con fines de investigación astronómica, para sobrecargar su batería, lo que provocó un colapso completo en su sistema.

Otros miembros de la comunidad de la ciberseguridad consideran que el creciente desarrollo de estos pequeños satélites también ha contribuido al incremento de los riesgos de seguridad. John Raymond, de la Fuerza Aérea de E.U. mencionó: “No debemos ocuparnos sólo de poner en órbita un satélite funcional y resistente al lanzamiento al espacio, también es necesario garantizar su defensa contra potenciales ciberataques”, concluyó.