Astra Linux, el sistema operativo seguro empleado por el ejército ruso

Hace algunos días, especialistas en seguridad en aplicaciones web reportaban la decisión del ejército chino de dejar de utilizar el sistema operativo Windows para comenzar a trabajar con un nuevo proveedor. Hasta el momento se desconocen mayores detalles, aunque se especula que las fuerzas armadas de China podrían haber cambiado a un sistema operativo basado en Linux.

Ahora han comenzado a circular versiones sobre una decisión similar del ejército de Rusia, que estaría en proceso de sustituir el sistema Windows con Astra Linux, desarrollado en territorio ruso. Astra es una distribución de Linux basada en Debian creada por la compañía RusBITech hace alrededor de diez años.

Originalmente empleada sólo por compañías privadas, esta distribución comenzó a ser admitida por organismos del gobierno ruso en años recientes. Para garantizar la adopción del sistema operativo entre las instituciones del gobierno ruso, Astra Linux cuenta con certificaciones para manejar información clasificada, mencionan los especialistas en seguridad en aplicaciones web.

Actualmente, Astra Linux cuenta con autorización de seguridad del Servicio Federal para el Control Técnico de Exportaciones de Rusia (FSTEC); en otras palabras, este sistema operativo tiene una autorización de ‘importancia especial’ para trabajar con información del gobierno ruso con los más altos estándares de privacidad. 

Acorde a los propios desarrolladores, el uso de Astra Linux reducirá los costos de verificación de integridad y seguridad de los sistemas empleados por las fuerzas armadas rusas.

Acorde a los especialistas en seguridad en aplicaciones web del Instituto Internacional de Seguridad Cibernética (IICS), el plan para implementar Astra Linux en los sistemas de la defensa rusa se remonta a principios de 2018. En esa ocasión, oficiales de las fuerzas armadas de Rusia plantearon la posibilidad de que existieran backdoors ocultos en el sistema operativo Windows, instalados por las agencias de inteligencia de Estados Unidos con fines de espionaje, señalamiento que tanto la compañía de tecnología, como el gobierno de E.U. han negado en repetidas ocasiones.

Por su parte, el gobierno chino también alegaría motivos de seguridad interna para justificar la decisión de dejar de utilizar el sistema operativo de Microsoft.