“Planes perturbadores” en China narrados por un ex empleado de Google

Share this…

Un antiguo empleado de Google advirtió sobre los planes a futuro de la empresa en China, en una carta dedicada a los legisladores estadounidenses

Jack Poulson, que había desempeñado como investigador senior en Google hasta su renuncia el pasado mes de agosto, redactó una carta en la que mencionaba que tenía miedo de las ambiciones de Google. En su carta, el especialista en hacking ético sostiene que Google ha estado colaborando en el desarrollo de un producto chino, cuyo nombre en clave es Dragonfly, ayudaría a las autoridades de Beijing para censurar y monitorear las actividades en línea de sus ciudadanos.

Google ha dicho que su trabajo en China hasta la fecha ha sido solamente exploratorio; Ben Gomes, jefe de búsqueda de Google, declaró para expertos en hacking ético a principios de esta semana: “En este momento todo lo que hemos hecho se ha limitado a la exploración, pero dado que no tenemos planes de lanzar algo, no hay mucho que pueda decir al respecto”.

Un informe publicado en un portal de noticias dijo la semana pasada mencionaba que Google habría exigido a los trabajadores que eliminaran una nota interna que discutía los planes. Google no ha comentado sobre la supuesta presión sobre su personal, pero portavoces de la empresa declararon: “Hemos estado invirtiendo durante muchos años para ayudar a los usuarios chinos, desde el desarrollo de Android, a través de aplicaciones móviles como Google Translate y Files Go, y nuestras herramientas para desarrolladores. No planeamos lanzar ninguna herramienta de búsqueda en China”.

La carta de Poulson detalla varios aspectos del trabajo de Google que habían sido reportados en la prensa pero que nunca habían sido confirmados oficialmente por la compañía. Esta declaración será presentada al Comité de Comercio del Senado, que tendrá una audiencia el miércoles en Washington DC.

El tema de la audiencia es “examinar las garantías para la privacidad de los datos del consumidor”. El jefe de privacidad de Google, Keith Enright, está citado en la audiencia, al igual que los representantes de AT&T, Apple, Twitter y Amazon.

La carta alega que Google está trabajando en:

  • Un prototipo de interfaz diseñada para permitir que una empresa china realice consultas sobre las búsquedas de un usuario determinado en función de su número de teléfono
  • Una extensa lista negra de censura desarrollada de acuerdo con las demandas del gobierno chino. Entre otras cosas, la lista contenía el término “Derechos humanos”, los términos en mandarín para “protesta estudiantil” y “premio Nobel”, y un gran número de frases que involucraban a Xi Jinping y otros miembros del Partido Comunista Chino
  • Código explícito para garantizar que sólo el gobierno chino dará información sobre la calidad del aire en el país asiático

Poulson dijo que la suma de estos esfuerzos equivalía a una falla catastrófica de las políticas internas de privacidad de Google, además de ir en contra de las garantías hechas al regulador comercial de los Estados Unidos con respecto a las medidas de protección de datos en sus productos.

Acorde a especialistas en hacking ético del Instituto Internacional de Seguridad Cibernética, la relación entre el gobierno chino y Google ya había encendido las alarmas; después del lanzamiento del token de seguridad de Google, trascendió la noticia de que el fabricante del dispositivo era una empresa china que colabora de cerca con el gobierno del país asiático.