Especialistas en seguridad informática afirman que Julian Assange, el polémico ciber activista fundador de la plataforma WikiLeaks, fue espiado constantemente durante siete años, tiempo que permaneció como refugiado político en las instalaciones de la embajada de Ecuador en Londres.
Según los reportes, una compañía de seguridad llamada Undercover Global, con sede en España, fue la encargada de espiar al activista lo más posible. La compañía mostró especial interés en monitorear las reuniones entre Assange y sus abogados, recopilando gran cantidad de audio y video.
Acorde a los expertos en seguridad informática, la compañía habría sido contratada por el gobierno de Ecuador como medida de seguridad contra las posibles consecuencias de mantener a Assange como refugiado del gobierno ecuatoriano. Según se ha reportado, los archivos recopilados por la compañía de seguridad incluyen los planes secretos para llevar a Assange a Rusia o, en su defecto, a Cuba. No obstante, el activista se habría negado a realizar este traslado, al considerarlo como una derrota de su movimiento.
La vigilancia sobre Assange incrementó a lo largo de la administración de Lenín Moreno, presidente de Ecuador; según mencionan los expertos en seguridad informática, el gobierno ecuatoriano incluso sometió al activista a algunas pruebas psicológicas, así como análisis de paternidad para determinar si él era el padre del bebé de una de sus colaboradoras. Finalmente, en abril de 2019 Lenín Moreno permitió que las autoridades británicas ingresaran a la embajada para detener a Assange.
Fuentes cercanas a la embajada de Ecuador en Londres afirman que Assange ya sospechaba que era espiado; ante esta sospecha, el activista comenzó a tomar medidas como el uso de un distorsionador de voz, además de cambiar sus reuniones a lugares aleatorios, como los baños de mujeres en la embajada.
Actualmente Assange se encuentra detenido en Reino Unido y, acorde a especialistas del Instituto Internacional de Seguridad Cibernética (IICS), la justicia de E.U. busca su extradición, acusándolo de haber publicado de forma ilegal miles de documentos secretos del Departamento de Estado de E.U., además de haber filtrado información clasificada sobre las campañas militares americanas en Oriente Medio.
Trabajando como arquitecto de soluciones de ciberseguridad, Alisa se enfoca en la protección de datos y la seguridad de datos empresariales. Antes de unirse a nosotros, ocupó varios puestos de investigador de ciberseguridad dentro de una variedad de empresas de seguridad cibernética. También tiene experiencia en diferentes industrias como finanzas, salud médica y reconocimiento facial.
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