Recientes informes de las agencias federales en E.U. señalan que China está preparando una campaña masiva para intervenir en la próxima elección presidencial con la intención de alterar la aparente estabilidad política americana.
Desde 2016 se mantiene latente la posibilidad de intrusión extranjera en estos procesos pero, ¿cómo es exactamente que potencias como Rusia o China pueden intervenir en las elecciones de Estados Unidos?
Los expertos creen que Facebook no aprendió la lección después del escándalo de Cambridge Analytica, señalando al gigante de las redes sociales como un activo fundamental en la manipulación de la intención del voto en E.U. En respuesta a estos señalamientos, hace algunas semanas Facebook anunció la eliminación de cientos de páginas, publicaciones y cuentas escritas en chino, inglés y filipino vinculadas a una operación extranjera, aunque sin señalar directamente al Partido Comunista.
Algunos miembros del Congreso de E.U. también han externado su preocupación sobre las intenciones reales de algunas organizaciones sin fines de lucro, llegando a solicitar investigaciones sobre sus potenciales vínculos con el Partido Comunista Chino y su interés en desplegar su propia narrativa en occidente.
Sobre la elección, los expertos señalan que China desea influir en la contienda para favorecer al candidato demócrata Joe Biden, pues la administración de Trump ha expresado constantemente su postura contraria al gobierno de Xi Jinping, estableciendo severas medidas económicas contra algunas importantes compañías asiáticas.
Por otra parte, expertos en ciberseguridad temen que las publicaciones en redes sociales no sean el único método usado por China para intervenir en la elección presidencial. Reportes indican que el gigante asiático cuenta con la capacidad de desplegar brigadas de líderes de opinión pública, bots y granjas de contenido para influir en la opinión pública y, al final, en los votantes americanos. Importantes empresas como Microsoft también han señalado esta posibilidad, revelando un informe sobre la capacidad de recopilación de información sobre la campaña de ambos candidatos y los think tanks a su disposición.
Por su parte, el investigador chino Dean Cheng cree que el Partido Comunista tiene un método más sutil para conseguir sus objetivos: “La mayor parte de este plan es usar los medios convencionales y digitales, aunque China podría estar dirigiéndose a las compras de bienes para los estados, que se ha convertido en un campo de batalla potencial; es difícil saber si estas acciones pueden ser sancionadas por el gobierno de E.U.”.
La intervención en las elecciones seguirá siendo un objetivo de las potencias como Rusia y China, aunque aún están por verse las acciones que tomará el gobierno americano para contrarrestar estas campañas.
Trabajando como arquitecto de soluciones de ciberseguridad, Alisa se enfoca en la protección de datos y la seguridad de datos empresariales. Antes de unirse a nosotros, ocupó varios puestos de investigador de ciberseguridad dentro de una variedad de empresas de seguridad cibernética. También tiene experiencia en diferentes industrias como finanzas, salud médica y reconocimiento facial.
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