Linux, desde siempre, ha sido un sistema operativo mucho más robusto, estable y seguro que Windows, y una muestra de ello es que la mayoría de las amenazas informáticas han asolado siempre al sistema operativo de Microsoft. Sin embargo, los tiempos cambian, y Linux nunca ha sido infalible, siendo una muestra de ello las nuevas amenazas que, poco a poco, van poniendo en peligro a este sistema operativo.
Aunque Linux sigue siendo un sistema operativo mucho más seguro que Windows, si los usuarios no tienen cuidado y lo configuran correctamente pueden ver sus datos expuestos a pesar de estar utilizando este sistema.
A continuación, vamos a ver los principales problemas de seguridad con los que cualquier usuario de Linux puede encontrarse.
Dual Boot con Windows y Linux, tan aliado como enemigo
El primero de los problemas, probablemente, sea el que más afecta a los usuarios. Una configuración muy común entre los usuarios aficionados a Linux es tener en el ordenador un sistema de arranque dual que permita elegir en cada arranque si queremos utilizar un sistema u otro.
Esto es muy práctico, pero también abre la puerta a varias debilidades a los usuarios de Linux. En primer lugar, mientras estamos utilizando Windows es posible infectarnos de malware y, según la naturaleza de este, podemos incluso a dejar inservible el disco duro o la partición donde tenemos instalado Linux.
Además de ello, la seguridad de Windows es bastante inferior a la de Linux, y es posible utilizar herramientas especiales que permitan borrar la contraseña del sistema operativo de Microsoft, acceder al sistema y, desde allí, utilizar aplicaciones que permiten montar unidades EXT4 (por ejemplo) en Windows y acceder a todos los datos.
Cómo protegernos de este problema de seguridad
La forma de protegernos de este problema es muy simple, basta con no instalar el arranque dual con Windows para evitar que se pueda acceder al disco duro desde él.
Sin embargo, si por algún motivo necesitamos tener el arranque dual en nuestro ordenador, lo mejor que podemos hacer es cifrar todo el disco de nuestro sistema operativo con aplicaciones como VeraCrypt o LUKS para que, en caso de que se vea expuesto, los datos no sean accesibles sin nuestra clave maestra.
El malware, cada vez más presente en Linux
Durante mucho tiempo, los piratas informáticos solo se han centrado en infectar a los usuarios de Windows que, al ser más frecuentes, podrían suponer una mayor tasa de éxito y, con ello, reportar un mayor beneficio. Sin embargo, en los últimos años esto está cambiando, y los piratas informáticos cada vez atacan más otros sistemas operativos, como macOS y, sobre todo, Linux.
Sin ir más lejos, en los últimos 6 meses hemos hablado de dos troyanos para este sistema operativo que han causado verdaderos estragos en los sistemas que utilizan este SO: Rex, Rakos y Fakefile.
El malware para este sistema, que durante mucho tiempo ha permanecido inviolable, es cada vez más complejo. Actualmente podemos ver tanto troyanos que buscan recopilar datos como gusanos que infectan ordenadores a través de la red y complejas puertas traseras que pueden brindar a un pirata informático de acceso total al sistema.
Dentro del ámbito del malware no podemos olvidarnos del ransomware, el peor tipo de malware visto en la historia de la informática que cifra todos los datos de los usuarios y pide un rescate por ellos. En 2015 se pudo ver el primer ransomware funcional para este sistema operativo, registrado como Linux.Encoder.1, y, desde entonces, esta amenaza no ha hecho más que crecer en este sistema.
Cómo protegernos del malware en este sistema operativo
Actualmente existen varias antivirus para Linux, por ejemplo, ClamAV, además de algunas opciones comerciales mucho más avanzadas. Sin embargo, no merece la pena optar por una de ellas, y es que con unas medidas de seguridad básicas como evitar ejecutar archivos sospechosos, hacer clic en enlaces recibidos a través del correo y descargar aplicaciones desde fuentes PPA no oficiales es muy complicado que terminemos infectados por malware.
El robo físico al que todos estamos expuestos
No todas las amenazas vienen por software, sino que también debemos tener en cuenta que siempre estamos expuestos a los robos físicos de nuestros equipos. En cualquier momento, especialmente si viajamos con nuestro ordenador portátil, es posible que una persona lo sustraiga, quedando así expuestos todos nuestros datos si no tenemos ninguna medida de seguridad adicional.
Cómo proteger nuestro ordenador del robo físico
Igual que en primer caso, la mejor forma de proteger nuestros datos del robo físico de un ordenador es teniendo los discos duros cifrados. De esta manera, si alguien se hace con el equipo no podrá acceder a los datos sin la clave, viéndose obligado a formatear el disco y borrar así nuestros datos si lo que de verdad quiere es utilizar el ordenador y no está interesado en nuestros datos.
Fuente: https://www.redeszone.net
Entusiasta de la seguridad cibernética. Especialista en seguridad de la información, actualmente trabajando como especialista en infraestructura de riesgos e investigador.
Experiencia en procesos de riesgo y control, soporte de auditoría de seguridad, diseño y soporte de COB (continuidad del negocio), gestión de grupos de trabajo y estándares de seguridad de la información.
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