El MIT crea un bot de Twitter capaz de recoger todas las locuras de Trump. Y no es el más curioso de todos

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Que Donald Trump es un candidato presidencial tremendamente polémico y que sus discursos despiertan el interés tanto de adeptos como adversarios es una realidad que la actualidad mediática viene evidenciando desde hace tiempo. Así, el líder republicano se ha convertido, durante los últimos meses, en epicentro noticioso de la mano de casos tan absurdos como el de avergonzar a Obama por ir a ver Star Wars, hasta por su particular boicot a Apple.

Unos hechos que le han valido hasta un vídeo musical creado por Eclectic Method en el que se recogen sus frases más memorables en tono satírico. La iniciativa, sin embargo, no es única en su especie, sino que el político despierta una larga de tendencias en la red, unas propuestas a las que ahora se suma un bot de Twitter desarrollado, ni más ni menos, que por investigadores del MIT.

Deep Drumf

Se trata de Deep Drumf, un robot de la plataforma de microblogging dado a conocer por The Next Web que se dedica a imitar el discurso del estadounidense con bastante acierto. Algo que consigue gracias a las llamadas técnicas de aprendizaje profundo de inteligencia artificial (como las redes neuronales que enseñan a los ordenadores a encontrar distintos patrones en los datos).

Deep Drumpf

Asimismo y según sus creadores –el citado instituto y el Laboratorio de Inteligencia Artificial (CSAIL)- , el bot ha logrado basarse en el discurso real y cotidiano del candidato debido a su simplicidad, “un hecho que lo convertía en el político más manejable que podíamos estudiar”, han comentado. Entre otros muchos, destacamos tuits como “Yo soy lo que ISIS necesita”. Memorable.

Otros bots destacables

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Por otra parte y como apuntábamos ya en el planteamiento de este artículo, lo cierto es que no se trata del bot más curioso de la plataforma de microblogging, sino que en ella hemos dado con numerosas cuentas de este tipo que merece la pena destacar. De hecho, Deep Drumpf ni siquiera es el único que tiene que ver con este particular político y que llama poderosamente la atención.

Así y por ejemplo, encontramos Trump Retweeps, un perfil que a finales de enero se convirtió en foco de la actualidad noticiosa. ¿La razón? Que se dedica a tuitear un flujo constante de información acerca de aquellas personas que son partidarias del candidato republicano. Unos datos que sirven para formarse una composición de lugar acerca de sus características, profesión, tendencias, actitudes y costumbres cotidianas; y que el bot toma prestados de su biografía.

Ffd8ffdb Bot

Algunos y para nuestra sorpresa, se manifiestan abiertamente admiradores de este líder, unas afirmaciones prácticamente impensables en nuestro país, en el que la clase política se encuentra desprestigiada casi por completo. Volviendo a los adeptos, hallamos de todo: desde empresarios y enfermeras hasta ejecutivos y profesores.

Por supuesto, Trump no es el único que copa esta clase de iniciativas (estas “máquinas” no constituyen novedad alguna) sino que otros bots curiosos son, entre otros, Por cada palabra, Wayback exe y We Didn’t Start It. El primero de ellos se dedica a tuitear el diccionario completo –algo que pretende hacer hasta el 2019 con intervalos de media hora-, mientras que el segundo es perfecto para los nostálgicos, pues lleva a cabo capturas del Archivo de Internet de páginas web antiguas encontradas a través de navegadores como Netscape y demás.

Polit

Respecto a We Didn’t Start It, está inspirado en la canción de Billy Joel We Didn’t Start the Fire (Storm Front) y resume la actualidad informativa usando la estructura y ritmo de esta composición. Una ocurrencia de Bradley Momberger de dudosa utilidad pero que ha despertado nuestro interés. Dear Assistant –que nos resuelve cualquier cuestión-, Quilt Bolt –que convierte cualquier imagen en un endredón de retales- y FFD8FFDB –al que ya dedicamos un post y que evidencia lo fácil que es vulnerar nuestra privacidad- no se quedan atrás en originalidad.

Al margen de los bots, no podemos dejar de comentar que Donald Trump cuenta, incluso, con su propio lenguaje de programación (porque puede, y punto): Trump Script. Un idioma de código abierto (disponible en GitHub) basado en Phyton y cuyos creadores no persiguen otro objetivo que el de que “su sintaxis sea aprobada por el glorioso peinado dorado” del republicano.

Fuente:https://www.genbeta.com/